lunes, 17 de febrero de 2014

PREPARA LA EUCARISTÍA DEL DOMINGO, DOMINGO VII, 23 febrero.

Palabra de Dios




 5,38: Habéis oído que se dijo: Ojo por ojo, diente por diente.
 
 5,39: Pues yo os digo que no opongáis resistencia al que os hace el mal. Antes bien, si uno te da una bofetada en [tu] mejilla derecha, ofrécele también la otra. 5,40: Al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica déjale también el manto. 5,41: Si uno te obliga a caminar mil pasos, haz con él dos mil. 5,42: Da a quien te pide y al que te solicite dinero prestado no lo esquives.


 
 5,43: Habéis oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo.
 
 5,44: Pues yo os digo: Amad a vuestros enemigos, rezad por los que os persiguen.5,45: Así seréis hijos de vuestro Padre del cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos y hace llover sobre justos e injustos.
 
 5,46: Si amáis sólo a los que os aman, ¿qué premio merecéis? También hacen lo mismo los recaudadores.
 
 5,47: Si saludáis sólo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? También hacen lo mismo los paganos.
 
 5,48: Sed, pues, perfectos como vuestro Padre del cielo es perfecto.   






                                   
Mt. 5 38-48
Reflexión
¡Sólo a Dios se le puede ocurrir que la persona pueda amar como ama Él!
Ante tal exigencia de amor. O dejas de ser creyente al no ser capaz de actuar como Jesús actúa, o aceptas que estar a su altura, desde el propio esfuerzo es imposible.
Y ante esa imposibilidad, empiezas a dejarte amar por Él. Desde lo que eres en realidad, no desde tu ideal.
Maravillado descubres que por parte de Dios sigues recibiendo amor, aunque tu praxis sea de desamor o egoísmo. 
Ante esa manera de ser de Dios: agradecido sonríes. Empiezas a tratar-te, a ti mismo y a los demás, tal como Dios te trata. 


Para aterrizar en tu vida:

¿Aceptas tu imposibilidad, por ti mismo-a, de estar a la altura del amor de Dios?
¿Dejas que Dios se acerque a tu intimidad más íntima?¿Compartes todo con Él?
Actúas des de la exigencia de tu ideal o des de la experiencia de generosidad que provoca la experiencia de ser amado gratuitamente por Dios?


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8 comentarios:

  1. Asumo mi imposibilidad de estar a Su altura de amar. Pero le pido que a través del amor incondicional q me da, me trasforme y me enseñe a amar a los demás..

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  2. ¡Acepto que por mi mismo, no puedo estar a la atura de Dios! Y aun así quiero disponerme a su querer, me atrae, me seduce...
    Es verdad que el Dios amor no siempre resuelve el problema, pero le da significado.
    Pep toni

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  6. Una cosa es amar a nuestros enemigos , y otra darle bombones al maligno.Con el diablo no hay que hablar , solo conocerle y evitarle.

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  7. Seguro que todo esto de mis faltas al redactar , tiene que ver con que he hablado del diablo y no le gusta.

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  8. Se ha eliminado contenido por haberse producido una errata en la escritura. Pep toni

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